Las ventas de vehículos de ocasión cerrarán el año con una subida del 6,5%, hasta situarse en 1.680.000 unidades aproximadamente, debido fundamentalmente al crecimiento de las operaciones de coches 'mileuristas' entre particulares, que crecerán por encima del 16%, según las estimaciones de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor (Ganvam).

Gracias a estas cifras, la relación de ventas VO/VN repetirá su marca histórica de 2,3 a 1, debido no tanto al crecimiento del mercado de usados como a la escasa demanda de nuevos, que terminará 2013 en unos niveles muy bajos: en torno a las 720.000 unidades.

Pese a que el impulso de los ya agotados Planes Pive y el Pima Aire ha permitido corregir al alza la previsión de cierre e incluso invertir la tendencia ( 3%), lo cierto es que las matriculaciones acumulan un retroceso de más del 55% desde el inicio de la crisis.

Las dificultades de acceso al crédito han convertido al usado casi sin quererlo en la solución de movilidad anticrisis de estos últimos años. No obstante, precisamente esta falta de financiación ha disparado las ventas de vehículos 'mileuristas' modelos que, por su antigüedad y elevado kilometraje, pueden pagarse al contado, representando ya casi la mitad del mercado (49%).

En un contexto donde el factor precio es determinante para llevar adelante la compra, no es de extrañar que seis de cada diez operaciones se produzcan ya entre particulares, precisamente con estos modelos de alta edad y bajas prestaciones que confieren al mercado volumen o, lo que es lo mismo, cantidad pero una calidad muy mejorable.

Para Ganvam, este protagonismo inusual del usado de más de diez años - que creció más del 11% en este último año -, unido al déficit de matriculaciones - en los últimos seis años han dejado de venderse tres millones de vehículos -, está haciendo un flaco favor al parque de vehículos, que envejece a pasos agigantados poniendo en peligro la seguridad vial y el cumplimiento de los criterios de emisiones.

Con el objetivo de afianzar la demanda creciente del VO y sintonizar con las previsiones de la DGT de rebajar a siete años su media de edad de aquí a 2016, la patronal aboga por extender los planes de estímulo a la compra hasta que la recuperación económica sea evidente, dando entrada a los vehículos usados de hasta cinco años y resucitando el espíritu de los primeros planes de ayudas como el Prever que, una vez extinguido, mantuvo un año más la ayuda al usado.

En palabras del presidente de Ganvam, Juan Antonio Sánchez Torres, "en un momento en el que estos coches son la primera opción de compra para muchos españoles por una cuestión de dinero, incentivarlos ayudaría a vencer las dificultades de financiación y las reticencias al cambio de coche, contribuyendo a retirar de nuestras carreteras vehículos que muchas veces son auténtica chatarra".

De hecho, programas como el agotado Pima Aire animan al usuario a acercarse al concesionario o compraventa en busca de un coche seminuevos, joven y asequible con todas las garantías, en lugar de jugarse la compra a la "lotería" que supone acudir a un particular.