El año 2023 ha llegado con grandes cambios en materia de movilidad, especialmente aquellos diseñados para reducir la contaminación en los grandes centros urbanos con más de 50.000 habitantes, como es el caso de Madrid y otros municipios de la Comunidad. Desde la asociación Aema-ITV recuerdan a las autoridades madrileñas el papel clave que juegan las inspecciones técnicas para proteger el medio ambiente al identificar los vehículos cuyas emisiones exceden los límites marcados por la normativa aplicable.

Datos facilitados por el Archivo de Vehículos de la Comunidad de Madrid a Aema-ITV muestra que, tan solo durante el mes de noviembre de 2022, las estaciones de ITV detectaron en la comunidad un total de 16.631 vehículos con defectos graves en el capítulo de emisiones de gases contaminantes.

Se trata de cifras que muestran la importancia de garantizar que todos los vehículos en circulación tengan la ITV al día para asegurar la buena calidad del aire en Madrid. Pese a ello, el absentismo sigue en cifras cercanas al 40%. Para reducir este porcentaje, desde Aema-ITV propone, entre otras medidas, el uso de las cámaras que controlen las zonas de bajas emisiones (ZBE) y la circulación por la M-30.

En el caso de Madrid, la normativa vigente desde el 1 de enero significa un cambio en la Ordenanza de Movilidad Sostenible, ampliando el radio del área restringida de la circulación de vehículos sin distintivo medioambiental. Esto supone la prohibición de acceso por las vías públicas urbanas del interior de la M-30 y por la propia M-30 a dichos vehículos.

Un control que está regulado por un equipo de cámaras que revisa si los vehículos que acceden a las ZBE cuentan con la pegatina medioambiental de la DGT. Desde Aema-ITV consideran necesario que este control se haga extensivo a la detección de los vehículos que accedan a la M-30 y circulen por los municipios de la región con la ITV caducada.

En palabras de Jorge Soriano, presidente de Aema-ITV, “tener la pegatina de medio ambiente de la DGT no es suficiente para garantizar que las emisiones del vehículo no exceden los límites marcados por la normativa, ya que puede darse el caso de que uno de los sistemas que no esté funcionando como debiera fuese precisamente el de emisiones contaminantes que es comprobado en las estaciones de ITV. Por ello, debemos lograr que todos los que circulen por nuestra Comunidad Autónoma tengan la ITV al día; sólo así podremos reducir la contaminación generada por los medios de transporte”.

El uso de las cámaras para controlar la ITV de los vehículos es una demanda que ya fue presentada en 2022 por la Asociación Española Aeca-ITV ante la Comisión de Seguridad Vial del Congreso de los Diputados. Desde Aema-ITV explican que el uso de la infraestructura de cámaras ya existentes en la M-30 y en los municipios de la región para llevar a cabo la detección de vehículos con la ITV caducada es un proceso sencillo. Las instalaciones actuales tienen un alto grado de automatización que permite cruzar la información de las imágenes detectadas con los datos del Registro General de Vehículos de la DGT. Además de comprobar si los vehículos tienen la etiqueta B, C, Eco o Cero de la DGT, se puede aprovechar el reconocimiento de la matrícula para comprobar si el vehículo ha superado favorablemente la inspección técnica.